Arrestan a colombiano que violo a centenares de niños, vendía los vídeos de las agresiones sexuales

Un hombre involucrado presuntamente en agresiones sexuales a por lo menos 274 niños y adolescentes en Colombia, donde es conocido como el "Lobo Feroz", fue detenido en Venezuela tras una cacería de varios años, según autoridades.

El sospechoso, a quien la revista Semana identifica como Juan Carlos Sánchez, de 37 años, vendía a pederastas los videos con las violaciones de sus víctimas.

Autoridades venezolanas confirmaron a las de Colombia su captura en diciembre, y ahora está recluido en una cárcel en Caracas a la espera de que se defina su eventual entrega.

Este hombre está sindicado "de más de 274 abusos a niños, niñas y adolescentes", dijo a Semana el general Jorge Vargas, jefe de la policía de investigación criminal (Dijin).

Según el oficial, en desarrollo de la investigación se han encontrado "múltiples cuentas de correo relacionadas con abusos de menores".

Sánchez había sido capturado en 2008 bajo sospecha de haber violado a un menor de 14 años, pero fue dejado en libertad ese mismo año.

De acuerdo con la publicación colombiana, desde entonces atacó a otros menores, con lo que su número de víctimas rondaría los 500.

Uno de los investigadores dijo a Semana que el hombre buscaba a sus víctimas en los salones de videojuegos de los centros comerciales y cometía los abusos en una vivienda de Barranquilla, en el norte de Colombia.

Las autoridades del país suramericano descubrieron que los archivos encriptados contenían varias carpetas cuyas contenidos resultaron difícil de digerir.

En una de las carpetas estaba un documento con imágenes de 276 niños desnudos diferentes, mientras que en otra carpeta, habían varios videos, de 2 a 5 minutos, de los abusos sexuales a cada uno de los menores.

“En muchos se oyen los gritos, los lamentos y las súplicas de las pequeñas e indefensas víctimas”, indican los reporteros de Semana.

Los investigadores también incluían conversaciones entre el mexicano y el colombiano que indicaban sugerencias para sus próximos abusos, el valor de los videos que enviaba Sánchez (entre $100 y $400) y el modus operandi para atrapar a sus próximas víctimas: visitar centros comerciales o locales en donde había juegos de videos.


La policía llevaba por lo menos cinco años tras su rastro, y gracias a un aviso de organismos de seguridad de México pudieron localizarlo.

En ese país las autoridades capturaron a un mexicano con cientos de videos que le enviaba Sánchez, que se identificaba en sus correos como "Lobo Feroz".

Fuente: AFP