Imágenes muestran la gran destrucción en el oriente de Cuba tras el paso de Matthew

Con vientos de 205 km/h el ciclón salió al mar como categoría 3, después de arrancar techos y paredes en viviendas y locales del Estado en Baracoa, Imías y Maisí, municipios del extremo este de la isla.

El acceso por carretera a San Antonio del Sur, Imías, Baracoa y Maisí, por las penetraciones del mar en la zona costera sur oriental de la provincia conocida por el Bate Bate. También quedó incomunicado el municipio de Yateras.

La agencia EFE reporta que en estos momentos, las calles de Baracoa y de otros municipios de la provincia de Guantánamo, donde las lluvias acumuladas alcanzaron los 300 milímetros, se encuentran intransitables por los escombros y el barro acumulado por los estragos causados por Matthew en las diez horas que permaneció sobre territorio cubano.

Las comunicaciones también están interrumpidas.

La periodista Mirna Rodríguez relato: "Ahora: oscuridad total, viento fuerte acabando con todo a su paso, lluvia intensa desbordando todo y mar llevándose el malecón, aunque te cuente esto es poco para describirte lo que aquí pasa en este momento. Los nerviosos se alteran a cada rato, alguna colega llora al pensar en hijos y familia, yo misma estoy muy preocupada por mis padres"…

"Oye esto ahora está apretando. Me paré en la puerta de la emisora y una racha trajo el sabor a sal hasta mi boca. No hay nada de información, es mucha la penumbra, ah y el techo del telecentro de aquí se cayó. Acaban de colapsar los teléfonos de aquí, vamos a ver hasta cuando nos acompaña Internet”….

Otro informador relataba: "El custodio como buen cubano exclama: ‘¡Se está acabando el mundo aquí adentro!’

El ojo de Matthew se situó esta madrugada en aguas al norte del extremo oriental de Cuba pero el ciclón continuaba castigando la zona, todavía con fuertes lluvias y vientos de más de 200 kilómetros por hora, y el aviso de huracán se mantenía para cinco provincias orientales cubanas.


Reportes iniciales obtenidos esta madrugada por Martí Noticias en la antigua villa de Baracoa, provincia de Guantánamo, uno de los tres municipios impactados por la pared del ojo de la tormenta junto con Imías y Maisí, dan cuenta de viviendas y locales del Estado destruidos total o parcialmente por la fuerza de los vientos.

“Ha sido un desastre”, dijo desde Baracoa el activista Keiber Rodríguez, relatando cómo Matthew arrancó techos y paredes de varias viviendas alrededor de su casa, así como los techos de una bodega, un cine, y un almacén.

También dejó sin techo el huracán al emblemático hotel La Rusa. cerca del Malecón de Baracoa, donde se rerportaban olas de más de cuatro metros, y afectó a otros hoteles como .El Castillo, Rio Miel, y La Habanera.

Randy Caballero contó a Martí Noticias cómo las penetraciones del mar, que alcanzaron el nivel de los techos, arrasaron un barrio costero baracoense conocido como La Playita o Patricio Lumumba.

La agencia EFE reporta que brigadas de salvamento y la Cruz Roja trabajaban en edificios de la ciudad para rescatar a personas que quedaron atrapadas en pisos altos, ya que el huracán derribó las escaleras.

Agrega que muchos habitantes que no habían abandonado sus casas tuvieron que hacerlo en medio del huracán para trasladarse a viviendas más seguras que luego también sufrieron daños, ya que el impacto de Matthew fue peor de lo esperado..

En Caimanera, los vientos arrancaron planchas de zinc y vigas de los techos y los vecinos estaban recogiendo los pedazos para empezar a reparar, dijo a Martí Noticias Ricardo Pelier, residente en ese pueblo aledaño a la base naval de Estados Unidos en la bahía de Guantánamo.


Otro efecto del huracán ha sido la incomunicación de los tres municipios ya mencionados y el de Yateras, debido a obstáculos viales e inundaciones y la ruptura del cable de fibra óptica que los conectaba con la ciudad de Guantánamo, la cabecera provincial. Baracoa estaba incomunicada por teléfono, y además por tierra debido a deslaves en el montañoso viaducto de La Farola.

Los vientos con que azotó el ojo del huracán la zona se han estimado entre 200 y 250 kilómetros por hora, con rachas superiores.

Después los vientos máximos sostenidos disminuyeron a 205 KM/h y Matthew pasó a ser un huracán categoría 3 en la escala Saffir-Simpson, de un máximo de cinco, pero sigue siendo un peligroso e intenso ciclón.

El centro del meteoro se movió tierra adentro cerca de Jauco, al sur de Guantánamo, alrededor de las 8 de la noche, indica el reporte del NHC.

Fuente Martinoticias

5 de Octubre 2016