Hispanos no pudieron cambiar nada en Washington, 40% de ellos en Florida votaron por Trump

La Cámara de Representantes y el Senado en manos de los Republicanos

La Cámara de Representantes (435 escaños) y un tercio del Senado (100 asientos). Ambas continuarán en manos republicanas, agudizando la hegemonía política del Partido Republicano, el Grand Old Party (GOP, en inglés): En la Cámara de Representantes los republicanos tendrán 236 escaños por 191 demócratas (con 218 se tienen la mayoría). El partido de Obama apenas gana 3 escaños más. Mientras que el Senado, que se renovaba en un tercio de sus miemros y que algunas encuestas apuntaban que podría cambiar de mayoría, los republicanos mantienen su primacía aunque por más estrecho margen: 47 senadores demócratas frente a 51 senadores repúblicanos, los primeros sólo han conseguido un escaño más.

Los hispanos no pudieron cambiar nada en el poder en Washington

Datos de la votación indican que un 33 % de hispanos hombres y 26 de mujeres latinas votaron por Donald Trump. A nivel nacional el 52 % de las mujeres blancas también prefirieron a Trump a pesar de lo que decían las encuestas y medios.

En la Florida 40 por ciento de los hispanos votaron por Trump. Los expertos están asegurando ahora que, aunque hubieran votado en masa por Clinton no hubiesen podido cambiar nada porque son minoría ante el electorado blanco.

Pero otro factor es que el electorado hispano vota dividido, y otros no acuden a las urnas.

A partir de aquí el reporte de EFE

El triunfo del republicano Donald Trump como presidente de EEUU es un golpe para la comunidad hispana, que se movilizó masivamente durante la campaña y las elecciones de hoy para rechazar su retórica antiinmigrante y los insultos contra esta minoría.

El magnate inmobiliario, que se postuló en junio de 2015 con un discurso en el que llamó a los indocumentados mexicanos “criminales” y “violadores”, ganó contra pronóstico a la demócrata Hillary Clinton con un holgado margen de votos electorales.

El republicano despertó desde los primeros días de su campaña a unos seguidores sintonizados con su promesa de construir un muro en la frontera con México, que además pagaría el Gobierno mexicano, según sus palabras.

Las mayores ovaciones en sus eventos de campaña los lograba cuando hablaba del muro y prometía que iba a expulsar a todos los indocumentados, que se calculan en once millones en el país, con “una fuerza de deportación masiva”.


La encuestadora Latino Decisions lamentó hoy que Trump se dedicó a “insultar a los latinos como parte de su estrategia para movilizar a los votantes blancos enojados”.

A la par de la retórica hostil de Trump, organizaciones latinas nacionales y locales se movilizaron para registrar un mayor número de votantes latinos que estaban habilitados para ello.

El electorado latino alcanzó así un número récord de 27,3 millones de hispanos habilitados para votar en estas elecciones generales, aunque tradicionalmente sufraga sólo la mitad.

Los primeros sondeos de la jornada electoral, a cargo de Latino Decisions, daban por hecho una participación de por lo menos dos millones más de votantes hispanos que en los comicios de 2012, en la que los hispanos empujaron el triunfo del presidente Barack Obama.

Activistas y los mismos inmigrantes indocumentados fomentaron también la naturalización de muchos de sus compatriotas, que aumentó un 37 % a nivel nacional, mientras en estados como Florida y Nevada, alcanzó el 50 %, según explicó a Efe Ben Monterroso, director de Mi Familia Vota.

Florida fue además escenario de un creciente número de votantes puertorriqueños, especialmente en el centro del país y que entraron a competir con el voto cubano, que tradicionalmente ha sido republicano.

Los votantes latinos, alrededor del 12 % del electorado del país, habían favorecido desde un principio y con un amplio margen a la demócrata Clinton, que desde el principio de su campaña prometió una reforma migratoria y un camino a la ciudadanía.

Según los sondeos a pie de los puntos de votación, una aplastante mayoría de latinos se habrían decantado en estos comicios por la exsecretaria de Estado, proyectando una ventaja de 61 puntos sobre Trump (79-18 %) en este sector de la población.

Los votantes hispanos eran especialmente importantes en estados volátiles como Florida, que le dio la victoria a Trump, y Nevada, que se decantó por Clinton, pero no fueron suficientes para asegurar el triunfo de la ex secretaria de Estado.

9 de Noviembre 2016