Celebraciones en toda Tailandia por rescate de jóvenes y entrenador atrapados en cueva

El entrenador fue la ultima persona rescatada este martes de la cueva inundada en Tailandia, reportaron las autoridades. La tercera jornada del dramático operativo resulto satisfactoriamente para salvar a los 12 niños y a su entrenador bloqueados desde hace más de dos semanas en la gruta.

Los últimos niños y el entrenador de 25 años fueron sacados de la cueva usando el mismo procedimiento del resto del equipo atrapado en la cueva.

La misión duró tres días y culminó con la evacuación de los 12 niños futbolistas y su entrenador, reporto el martes la Fuerza Especial de la Marina tailandesa en su página de Facebook.

"Los 12 Jabalíes Salvajes -el nombre de su equipo de fútbol- y su entrenador fueron evacuados de la cueva", anunció en Facebook el cuerpo de élite de la marina tailandesa que participó en el rescate.

Tras el éxito de la primera y segunda misión, en las que fueron rescatados en total ocho niños, el contingente internacional del equipo de rescate tiene previsto adentrarse a lo largo del martes en la gruta para proceder al rescate del resto del grupo, atrapado a unos 4 kilómetros de profundidad desde el 23 de junio.

Narongsak Ossottanakorn, portavoz de los efectivos de rescate, evitó el lunes precisar a qué hora del martes comenzaría la operación tras anunciar una interrupción temporal de las labores para reponer el material utilizado en la evacuación y evaluar las condiciones en la caverna.


Varios helicópteros en aparentes tareas de traslado de emergencia sobrevolaron el campamento de prensa situado a dos kilómetros de la cueva, según pudo constatar Efe.

El primer ministro de Tailandia, Prayut Chan-ocha, supervisó esta tarde el operativo de evacuación.

Los miembros de salvamento, junto a los niños, tuvieron que superar para alcanzar la boca exterior de la cueva una ruta compleja con laberínticas galerías parcialmente inundadas y con desniveles y visibilidad nula.

Reportes indican que fueron sedados para que no entraran en pánico.

La única forma de sacar a los atrapados de la cueva de Tham Luang Nang Non, en la región de Chiang Rai, es a través de unos oscuros y estrechos pasadizos llenos de agua enlodada, fuertes corrientes y con poco oxígeno. Un antiguo miembro de los equipos especiales de la Armada tailandesa falleció en esa ruta el viernes.

Expertos en rescates en cuevas consideraron que salir buceando era la última opción, especialmente con personas no entrenadas como los niños. Se considera que la ruta es especialmente complicada por los giros y curvas en los estrechos pasajes inundados.

Pero el gobernador que supervisa la misión dijo antes que el buen clima y el descenso del nivel del agua en los últimos días habían creado las condiciones óptimas para una evacuación submarina, que no se mantendrían por mucho tiempo si vuelve a llover.

Entre la primera operación, el domingo, y esta segunda, las autoridades interrumpieron el rescate durante unas 14 horas para proceder a la reposición de las bombonas de aire comprimido utilizadas durante los trabajos de evacuación y evaluar las partes inundadas de la gruta.

La llegada el sábado pasado de un temporal de lluvias a la región y que permanecerá durante gran parte de la semana marcó el inicio de la operación de rescate.

Las precipitaciones son una de las principales preocupaciones de las autoridades, debido a que el agua filtrada por el monte puede volver a inundar las galerías y anular el drenaje efectuado desde que fueron hallados con vida los 12 escolares, de entre 11 y 16 años, y su tutor, de 26.

Narongsak insistió en alertar del problema que suponen las lluvias, pero dijo que un equipo de militares se encuentra en el monte con la tarea de bloquear la entrada de agua hacia los túneles subterráneos.

Los trece atrapados se internaron en las galerías el sábado 23 de junio tras un entrenamiento de fútbol cuando una súbita tormenta comenzó a inundar la cavidad y les cortó la salida.

Fueron encontrados tras nueve días de intensa búsqueda en la que participaron más de 1,300 personas.

Antes de anunciar el inicio del rescate, las autoridades dijeron a las decenas de medios de comunicación de todo el mundo congregados ante la cueva que abandonasen el lugar.

Los chicos, de entre 11 y 16 años, y su entrenador de 25 años quedaron atrapados cuando fueron a explorar la cueva luego de un partido de entrenamiento el 23 de junio. Las inundaciones provocadas por el monzón les bloquearon la salida e impidieron que los rescatistas los encontraran durante casi 10 días.

Las autoridades dijeron que las lluvias del monzón que se esperan podrían aumentar el nivel del agua en la cueva, lo que sumado a la caída del nivel de oxígeno en el espacio, dieron sensación de urgencia al rescate. Los anteriores esfuerzos para bombear agua fuera de la cueva sufrieron un retroceso cada vez que se produjo un fuerte aguacero.

Agencias

10 de Julio 2018