Arrestan al violador de abuela de 85 años en Argentina
Autoridades de Argentina lograron detener al violador de Celia, una abuela jubilada de 85 años.
Si bien, las autoridades no han revelado el nombre del acusado, subrayaron que tiene solo 20 años y nación en la provincia de Misiones, Argentina.
Ahora el acusado enfrentará un proceso judicial en su país par apagar por el violento acto cometido.
La Policía de Investigaciones de Argentina detallaron que fue en una casa de las afueras de la ciudad donde encontraron rastros del violador.
En dicho lugar fue encontrada un arma de fuego, la capucha descrita por Celia y la bicicleta en la que escapó.
Videos de las cámaras de seguridad de uno de sus vecinos ayudaron a identificar al ladrón.
Medios locales difundieron las imágenes de la captura del hombre de 20 años.
En el lugar de la captura también se encontró un control remoto, perteneciente a Celia.
Lo que aún se desconoce es cómo entró con tanta precisión a casa de la víctima, lo cual se sigue investigando.
Hasta el momento es toda la información que se tiene sobre el caso, pero las autoridades seguirán informando sobre la condena para el violador.
La anciana fue violada brutalmente.
Celia tiene 85 años, es una mujer noble, solidaria y que no le hace daño a nadie; así es como ven sus nietos a su abuela quien fue cruelmente violada y robada.
Son ya 50 años los que cumplió viviendo en una colonia de La Plata, Argentina.Vive sola y son solo dos cuidadores los que se alternan para cuidarla por el día.
Por la noche se queda sola y encerrada con alarmas para su seguridad; sin embargo, esto no impidió que un hombre entrara a su hogar para cometer el delito de violación.
Celia estaba durmiendo en su cama, fue cuando entonces escuchó un ruido que la despertó de inmediato, pero no le dio tiempo de hacer nada, segundos después ya había un hombre con capucha encima de ella quien no titubeó y la violó. El atacante usó preservativo para no dejar rastros de su ADN.
Ladrones roban una casa y violan a una anciana de 85 años
No había ninguna cerradura forzada, la alarma fue apagada y la puerta estaba cerrada con seguro; todo era muy planeado.
Del lugar solo se llevó una televisión y dinero en efectivo, y parte de ello se pudo ver en las cámaras de seguridad que rodean el lugar; sin embargo, fue imposible reconocer el rostro del hombre.
Los familiares tienen algunas sospechas sobre quién pudo haber sido, pero no han dado declaración alguna puesto que, la investigación sigue y no quieren entorpecerla.
Además, aseguran que alguien le dio las llaves del lugar al atacante, y sabía de los movimientos de la señora, sin mencionar que tenían el conocimiento de que había una alarma.
Lo más triste de todo es que tras lo acontecido, Celia solo declaró el robo que había sufrido pues le apenaba relatar su violación, pero al final terminó hablando del duro momento que pasó.
Hoy Celia y su familia esperan que pronto termine esta pesadilla y encuentren a la persona que cometió el crimen.
