Al grito de Allahu Akbar, inmigrante de Uzbekistán fanático de inspiración islámica mato a 8 en New York

Un atentado terrorista, aparentemente de inspiración islámica, causó este martes ocho muertos y más de una decena de heridos por un atropello múltiple en Manhattan perpetrado por un sujeto que fue herido por la Policía y que fue detenido.

Aunque las autoridades sólo han señalado que el sujeto tiene 29 años, medios locales lo identificaron como Sayfullo Saipov, un inmigrante de Uzbekistán que había llegado a Estados Unidos hace siete años.

El terrorista vivió en Ohio y Florida y actualmente residía en New Jersey .

De acuerdo con los informes oficiales, el sujeto, que conducía una camioneta rentada, irrumpió en un carril para bicicletas en el suroeste de Manhattan y arrolló a la mayoría de las personas a lo largo de unas 15 cuadras.

El vehículo terminó chocando contra un autobús escolar y el sujeto salió de la camioneta empuñando una pistola de perdigones y otra de paintball, antes de que recibiera uno o varios disparos en el abdomen y quedara herido.

Medios locales como The New York Times o CNN, señalan que varios testigos de los hechos oyeron cómo el atacante gritaba "Allahu Akbar" (Alá es grande).

La policía sólo confirmó que el sujeto, al salir del vehículo, lanzó algunos gritos que eran "consistentes con la calificación de acto terrorista".

Las imágenes grabadas en teléfonos celulares y reproducidas por la televisión mostraron al sujeto, con una larga barba, caminando por la calle y portando las dos pistolas.

Conforme a una persona que asegura ser amiga del atacante, Kobiljon Matkarov, el presunto terrorista vivía recientemente en el vecino estado de Nueva Jersey, aunque tenía documentos que indicaban que había residido previamente en la ciudad de Tampa, Florida.

The New York Times publicó que los investigadores encontraron dos notas manuscritas en árabe cerca del vehículo que utilizó el atacante en las que se apunta su fidelidad al grupo terrorista autodenominado Estado Islámico (EI).

El atentado se registró hacia las 15: 05 horas locales y la zona quedó completamente acordonada por fuerzas policiales, vehículos oficiales y ambulancias.

Este es un vecindario tranquilo, es muy raro que eso ocurra", dijo a la agencia EFE Jailine Maldonado, una estudiante de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY).

Bicicletas en el piso, heridos y cuerpos cubiertos con sábanas era la escena poco después del atentado, que llenó de asombro y terror a transeúntes, estudiantes y residentes de esa zona.

Decenas de periodistas y de curiosos que captaban en sus celulares la escena abarrotaron la esquina de las calles Chambers y Greenwich del bajo Manhattan, mientras algunos testigos contaban de lo ocurrido

El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, calificó el ataque como "un cobarde acto de terrorismo" que costó la vida de "ocho inocentes" que se encontraba en el lugar, cerca de la orilla del río Hudson.

"Ha sido una tragedia horrible", agregó De Blasio, que estaba acompañado por el gobernador del estado, Andrew Cuomo, y por el jefe de la Policía de Nueva York, James O'Neill.

Seis de las víctimas, todas ellas varones, perecieron en el lugar de los hechos y las otras dos personas murieron mientras eran transportadas a un hospital.

Dos de los heridos son menores que iban en el autobús con el que chocó el vehículo del autor del atentado.

No se ha facilitado una cifra exacta de heridos, pero las autoridades señalaron que entre ellos hay 11 personas que sufrieron lesiones graves, aunque no está en riesgo su vida, y señalaron que posiblemente haya más personas lesionadas.

El incidente ocurrió horas antes del multitudinario desfile de Halloween, que reúne a miles de personas disfrazadas por las calles del West Village, cercano al lugar del atentado.

No obstante, las autoridades indicaron que el evento se celebraría como habitualmente y con una presencia reforzada de seguridad.

Agencias

31 de Octubre 2017