Corea del Sur amenaza con destruir por completo a Corea del Norte tras nuevo lanzamiento de misil

La paciencia de Estados Unidos se agota frente a las provocaciones de Corea del Norte y, aunque la estrategia es apurar la vía diplomática, no aceptará que Pyongyang continúe con “sus peligrosas amenazas”, afirmó el viernes Robert Wood, representante de Washington en la Conferencia de Desarme de la ONU.

“Nuestra paciencia está cada vez más fina. La idea es maximizar las sanciones y, aunque vamos a agotar las opciones diplomáticas, no vamos a permitir que Corea del Norte continúe con sus provocaciones y con sus peligrosas amenazas”, advirtió en una rueda de prensa.

Pyongyang lanzó esta mañana otro misil balístico, el décimo desde el pasado mayo, y la primera prueba armamentística desde que el Consejo de Seguridad de la ONU impuso el pasado lunes al régimen de Kim Jong-un duras sanciones en respuesta al ensayo nuclear del 3 de septiembre.

El presidente de Corea del Sur Moon Jae-in, ha reaccionado con dureza y ha condenado el lanzamiento de un misil balístico realizado este viernes por Corea del Norte, afirmando que es "imposible" dialogar con ese país y advirtiendo que Seúl es capaz de destruirlo por completo en caso de nuevas provocaciones, informa la agencia de noticias Yonhap.


Corea del Norte lanzó un misil balístico el viernes en su vuelo de prueba más largo hasta la fecha, con un proyectil de mediano alcance que sobrevoló Japón y se estrelló en el norte del Océano Pacífico. El lanzamiento sobre un país aliado de Estados Unidos transmitía tanto un desafío a sus rivales como un gran avance tecnológico.

Desde que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó a Pyongyang con “fuego y furia” en agosto, el país ha realizado su ensayo nuclear más potente hasta la fecha, amenazado con enviar misiles a las aguas en torno al territorio estadounidense de Guam en el Pacífico y lanzado dos misiles de creciente alcance sobre Japón.

En julio realizó sus primeras pruebas de misiles balísticos intercontinentales capaces de alcanzar el territorio continental estadounidense cuando sean perfeccionados.

La creciente frecuencia, potencia y confianza mostrada por estas pruebas parecía confirmar lo que los gobiernos y expertos externos temen desde hace tiempo: Corea del Norte está más cerca que nunca a su objetivo de construir un arsenal militar que pueda atacar tanto a las tropas estadounidenses en Asia como el territorio de Estados Unidos.

Agencias

15 de Septiembre 2017