Estados Unidos sale del Acuerdo de París por considerarlo beneficioso para otros países y desventajoso para la nación

El presidente Donald Trump anunció este jueves que Estados Unidos se retirará del acuerdo de París sobre cambio climático, aunque dijo que su gobierno está dispuesto a negociar un nuevo entendimiento relativo al clima.

“En el día de hoy, Estados Unidos cesará toda implementación del acuerdo de París y las pesadas cargas financieras y económicas impuestas a nuestro país”, dijo Trump durante una ceremonia en los jardines de la Casa Blanca.

“De forma que estamos saliendo pero vamos a comenzar a negociar y veremos si podemos alcanzar un acuerdo justo. Si podemos, será excelente. Si no podemos, también. Como presidente, no puedo poner otra consideración por delante del bienestar de los estadounidenses”, expresó.

En la visión del presidente estadounidense, la adhesión de Estados Unidos al acuerdo global contra el cambio climático es un ejemplo de “Washington ingresando a un acuerdo que es desventajoso para los estadounidenses”.

El acuerdo “deja a los trabajadores estadounidenses, a los que amo, y a los contribuyentes para absorber el costo, en términos e pérdida de empleos, menores salarios, cierre y fábricas y enorme reducción en la producción económica”, dijo.

"Con el fin de cumplir con mi solemne deber de proteger EE.UU. y sus ciudadanos, EE.UU. se retirará del Acuerdo de París", resalto el mandatario, quien agrego que EE.UU. iniciará las negociaciones para volver a formar parte del acuerdo u otra iniciativa similar "bajo condiciones justas" para su país.

En su versión actual, para EE.UU. el Acuerdo de París supone "desventajas" en "beneficio exclusivo de otros países" y genera "pérdidas de puestos de trabajo, sueldos bajos, el cierre de fábricas y una inmensa disminución de la producción económica", ha recalcado Trump.

Tras tachar el pacto actual de "injusto", el mandatario ha señalado que "cualquier nuevo acuerdo tendrá que repartir las cargas y responsabilidades de manera equitativa entre las naciones del mundo".

Concluido a finales de 2015 en la capital francesa bajo los auspicios de la ONU, este acuerdo tiene por objetivo limitar el ascenso de la temperatura mundial reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero.

Una retirada estadounidense representa una verdadera deflagración, 18 meses después de lograrse este acuerdo histórico del que Pekín y Washington, bajo la presidencia de Barack Obama, fueron los arquitectos centrales.

Agencias

1 de Junio 2017